Songs For Beginners.

El próximo día doce de Junio, sino pasa nada raro, acudiré a San Sebastian a ver en directo a Graham Nash. El dia 6 veré a Costello, pero eso será otra historia. Tenia muchas ganas de encontrarme frente a frente con alguno de los grandes de CSN. Soy un gran admirador de la obra del supergrupo (sobre todo los dos primeros álbumes, que me parecen sencillamente extraordinarios) y de gran parte del trabajo en solitario de cada uno de sus miembros. Nash siempre pujó con Stephen Stills por ser mi preferido de los tres. Su album de debut es mi favorito de todos ellos (incluido el de Neil, por cierto) y estos días lo estoy repasando gozosamente. Es un disco absolutamente delicioso.

En la propuesta de Nash uno no va a encontrar la excelencia estilística de un Stills ni la complejidad experimental y armónica de un Crosby, pero estamos ante un autor de melodías extraordinario. Habiendo escuchado todos sus discos en solitario, Songs For Beginners, editado en 1971 (tras su ruptura con Joni Mitchell) es el disco por excelencia de Nash. Aquel en donde sus inquietudes politico-sociales (Military Madness, Chicago) y sus extraordinarias dotes para la emoción y la belleza (Better Days, I Used To Be A King), se dan la mano en un equilibrio sencillamente perfecto. Quedaban atrás los Hollies y Nash entraba de lleno en la aristocracia del rock. Creo que nunca se ha bajado de esa posición a pesar de su irregular legado post-70 y su constante relación de amor-odio con sus míticos compañeros generacionales. Hace unos años se editó una edición especial de este album con tomas alternativas e inéditos que merece mucho la pena. Uno de mis discos favoritos de los setenta.