No hay nada que el paso del tiempo no cure. Y en música, aun con mas razón si cabe. Me sorprendí a mi mismo esta semana escuchando este disco de El Ultimo de La Fila una y otra vez. Recordaba lo mucho que sonaron en las FM allá por el verano del 93 canciones como Como Un Burro Amarrado en la Puerta del Baile o Lapiz y Tinta y lo mucho que llegué a detestar ese sonido aflamencado y la voz de Manolo García. Prejuicios de juventud, supongo. Tampoco el tener un hermano que ponía sus discos a todas horas ayudó demasiado. Aunque hoy se ríe cuando le digo que me he enganchado a este disco. La vida es un ciclo. Realmente no es un grupo que me guste en un sentido global. Lo he intentado con otros discos suyos mas afamados (Enemigos de lo Ajeno, por ejemplo) y la experiencia, no se porqué razones, no ha sido igual. Lo veo mas un grupo de canciones que de discos. O quizás el inconsciente me esté jugando una "buena" pasada con Astronomía Razonable. Es probable que en su día no admitiera, por orgullo o cabezonería, que canciones como Hierbas de Asia o Mar Antiguo me gustaban mucho y ahora, pasados tantos años, resurgen para ocupar su sitio en mis gustos musicales patrios. La cuestión es que es este disco, que los expertos en el grupo consideran el principio del fin de su carrera, me gusta y mucho. Tengo claro que si estos dos tipos se volvieran a unir para una gira, arrasarian con todo, pero tiene su encanto que lo dejaran cuando mas arriba estaban a nivel comercial.
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