Tener diez años en 1985 fue todo un regalo. Aquel año fue muy intenso para mi. Digamos que mi imaginación y mi capacidad para soñar se multiplicaron por cinco. Porque si hay un momento en el que las películas de aventuras para adolescentes alcanzaron su climax, fue aquel. Los Goonies, Regreso Al Futuro, Los Gremlins, Cocoon, El Club de los Cinco, Exploradores....Menuda hornada de películas. Algunas de ellas absolutamente maravillosas, otras mas discutibles, pero hace treinta años el cine era un hervidero de emociones para los chicos de mi generación. De todas ellas, el mayor impacto lo tuvo Los Goonies. Película que todos los de mi edad habremos visto mas de dos docenas de veces y que un día todos soñamos con vivir una experiencia similar. La historia perfecta y el momento perfecto. Regreso Al Futuro no ha perdido un ápice de su magia, a pesar de su sobreexplotación televisiva y de sus también estupendas secuelas. Un momento único en la historia del cine, en el que la calidad no estaba exenta de imaginación y magia. Ahora los efectos por ordenador avasallan con todo y poco queda ya de la sensación de vértigo de aquellas historias tan bien contadas. Nada como la nostalgia.
Ya no se hacen películas con ese cariño, bueno, ya no se hacen películas para niños... sólo hay superhéroes dando mamporros y pelis de animación para adultos disfrazadas para pequeños..... es volver a ver Los Goonies y ser feliz. Un abrazo.
ResponderEliminarNikochan: Gracias por pasarte por este espacio. Es evidente que ese cine que vivimos y con el que soñamos de chavales no va a volver. Lo triste es que lo hay ahora es que ni siquiera se le parece. Vivan los goonies. Abrazos
ResponderEliminarSuper 8 estuvo cerca de esto. Quiza peliculas como La Invencion de Hugo tambien estan cerca. Pero si, nuestra infancia esta ligada a unas peliculas que las nuevas generaciones no pueden ni soñar .... por mas que adore a Tony Stark :-)
ResponderEliminarTienes razon en lo de Hugo. Aparte de parecerme la mejor pelicula de Scorsese desde Uno de los Nuestros, creo que recupera esa magia de la que hablo. Abrazos.
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